El olmo tiene bellas ramas, pero no da fruto.
El orgullo y la pobreza están hechos de una pieza.
El paraíso está en el regazo de una madre.
El pasado tiene más perfume que un bosquecillo de lilas en flor.
El paso de la vida, no es atravesar una llanura.
El perezoso considera suerte el éxito del trabajador.
El perro permanece perro, aunque sea criado entre leones.
El precio se olvida, la calidad permanece.
El puente sólo se repara cuando alguien se cae al agua.
El que ama la corrección, ama la sabiduría
El que antes de su muerte ha plantado un árbol, no ha vivido inútilmente.
El que busca un amigo sin defectos se queda sin amigos.
El que está enfermo no reusa la medicina. (un enfermo es dócil y hace todo por curarse).
El que hoy te compra con su adulación mañana te venderá con su traición.
El que nada duda, nada sabe.
El que no da un oficio a su hijo, le enseña a ser ladrón.
El que no puede sobrellevar lo malo no vive para ver lo bueno.
El que ofende escribe en arena; el que es ofendido, escribe en marmol.
El que quiera ser líder debe ser puente.
El que quiere hacer algo busca un miedo; el que no quiere hacer nada busca una excusa.
El que se pone de puntillas no puede sostenerse derecho.
El que se rompe los dientes con la cáscara raramente come la almendra.
El que te enseña por un día es tu padre por toda la vida.
El que teme sufrir ya sufre el temor.
El que usó mal incienso debe atenerse a quemarse las mangas.