Ningún valor psíquico puede desaparecer sin ser sustituido por otro equivalente en intensidad.
No es ningún arte ser un hombre sincero, cuando se tiene diariamente sopa que tomar a cucharadas.
No puede conseguirse ningún progreso verdadero con el ideal de facilitar las cosas.
No puedes hacer un acto amable demasiado pronto, porque nunca sabes cuándo será demasiado tarde.