Escucha a tu voz interior y sigue adelante, aún cuando las personas te digan que no puedes hacerlo.
Esperar duele. Olvidar duele. Pero el peor de los sufrimientos es no saber qué decisión tomar.
Existe al menos un rincón del universo que con toda seguridad puedes mejorar, y eres tú mismo.
Hay algo absolutamente tranquilizador sobre la televisión: lo peor está siempre por venir.
Hay que guardarse bien de un agua silenciosa, de un perro silencioso y de un enemigo silencioso.
La esperanza es el peor de los males, pues prolonga el tormento del hombre.