Dios tiene dos tronos. Uno en lo más alto de los cielos y otro en el más humilde de los corazones.
Dios: una enfermedad de la que imaginamos estar curados porque nadie se muere de ella hoy en día.
Dondequiera que vayas, busca siempre la belleza y la inmensa bondad de dios.
El abandono en dios es un don y al mismo tiempo, la mayor manifestación de la libertad del hombre.
El desconocimiento propio genera soberbia; pero el desconocimiento de Dios genera desesperación.