Ahí radica el verdadero poder de los medios masivos: son capaces de redefinir la normalidad.
Al amor lo pintan ciego y con alas. Ciego para no ver los obstáculos y con alas para salvarlo.
Al brillar un relámpago nacemos y aún dura su fulgor cuando morimos; tan corto es el vivir.
Al poder se sube casi siempre de rodillas. Los que suben de pie son los que tienen derecho a él.
Al principio de las catástrofes, y cuando han terminado, se hace siempre algo de retórica.
Aléjese de los palacios el que quiera ser justo. La virtud y el poder no se hermanan bien.