La vida real del hombre es feliz, principalmente porque él siempre espera que pronto lo sea.
Las sociedades deben juzgarse por su capacidad para hacer que la gente sea feliz.
Mi consejo es que te cases: si encuentras una buena esposa serás feliz, si no, te harás filósofo.
Para ser feliz hay que vivir en guerra con las propias pasiones y en paz con las de los demás.