No te apartes de mí, ven cada día a hacerme triste, a hacerme hombre, hijo tuyo... Visítame.
No te fies de las palabras: En esta vida encontrarás a muchas personas que viven mal y hablan bien.
Nosotros debemos nuestra vida a dios, por eso si se la pagamos hoy, no se la deberemos mañana.
Nuestra mayor gloria no está en no haber caído nunca, sino en levantarnos cada vez que caemos.
Nunca mejora su estado quien muda solamente de lugar y no de vida y de costumbres.