Aguardar demasiado a un convidado es una falta de consideración para los que están presentes.
Al amor lo pintan ciego y con alas. Ciego para no ver los obstáculos y con alas para salvarlo.
Al carajo con la verdad. El estilo es más importante: cómo hacer una por una cada cosita.
Al hacer una profunda reverencia a alguien, siempre se vuelve la espalda a algún otro.
Al hombre perverso se le conoce en un sólo día; para conocer al hombre justo hace falta más tiempo.
Alegría, estudio y piedad: es el mejor programa para hacerte feliz y que más beneficiará tu alma.