Si eres mi sangre cómo no estás en mis venas, pasando y repasando mi corazón que no duerme.
Si haces bien para que te lo agradezcan, mercader eres, no bienhechor; codicioso, no caritativo.
Si quieres ganar un adepto para tu causa, convéncelo primero de que eres su amigo sincero.
Sólo hay un rincón en el universo que a buen seguro puedes mejorar y ese rincón eres tú.