Si nada nos salva de la muerte, al menos que el amor nos salve de la vida.
Si no perdonas por amor, perdona al menos por egoísmo, por tu propio bienestar.
Si no poseo el gusto del misterio es porque todo me parece inexplicable, o mejor dicho, porque lo inexplicable es mi único sustento y estoy harto de él.
Si no puedes trabajar con amor sino sólo con desgana, mejor será que abandones el trabajo y te sientes a la puerta del templo a recibir limosna de los que trabajan con alegría.
Si no recuerdas la más ligera locura en que el amor te hizo caer, no has amado.
Si quieres estar seguro de todo cuanto deseas, desea lo que puedas.
Si quieres ser un gran líder, recuerda tratar a todo el mundo y en todo momento con respeto. Primero, porque nunca sabes cuando necesitarás su ayuda. Segundo, porque es un signo de respeto hacia la gente, lo cuál hacen los líderes.
Si quieres tener éxito, promete todo y no cumplas nada.
Si sale, sale. Si no sale, hay que volver a empezar. Todo lo demás son fantasía.
Si sientes que todo perdió su sentido, siempre habrá un ¨te quiero¨, siempre habrá un amigo. Un amigo es una persona con la que se puede pensar en voz alta.
Si somos libres, todo nos sobra.
Si su amor fue una comedia, su matrimonio será un drama.
Si te contara todo lo que hago con tu querido retrato te reirías. Por ejemplo, cuando lo saco de su calabozo, le digo: ¡buen día, tesoro!, buen día, buen día; mocosa, pícara, nariz de punta, chichecito.
Si te preguntas porque no dejo de acariciarte, es que mi amor se desborda y sobre tu cuerpo se convierte en arte.
Si te sientes propenso a la reconciliación, pregúntate, ante todo, qué es lo que te ha hecho tan manso: la mala memoria, la comodidad o la cobardía.
Si todo el año fuese fiesta, divertirse sería más aburrido que trabajar.
Si todo el mundo demandase paz en lugar de otro programa de televisión, entonces habría paz.
Si todo el mundo practicara yoga, las farmacias tendrían que cerrar.
Si todo parece estar yendo bien, obviamente has pasado algo por alto.
Si una persona ama sólo a otra y es indiferente al resto de sus semejantes, su amor no es amor, sino una relación simbiótica o un egoismo ampliado.
Si usted ama, no es ese amor lo que forma parte de su destino: es la conciencia de usted misma que usted habrá encontrado en el fondo de ese amor lo que modificará su vida.
Si vamos a crecer en el amor, las cárceles de nuestro egoísmo deben ser desbloqueadas. Esto implica sufrimiento, esfuerzo constante y elecciones repetidas.
Si vas a creer todo lo que lees, mejor no leas.
Si vienes a casa, tráeme, amor mío, una luz y una ventana desde la que pueda ver la felicidad que bulle en la calle.
Si yo no hubiera sido, el alma mía repartida pondría en cada cosa una chispa de amor...