Las mujeres han servido durante todo este siglo como espejos que poseyeran el poder de reflejar la figura del hombre a un tamaño doble del natural.
Las mujeres llaman arrepentimiento al recuerdo de sus faltas; pero, sobre todo, al sentimiento de no poder cometerlas de nuevo.
Las mujeres no son más que órganos genitales articulados y dotados de la facultad de gastar todo el dinero del hombre.
Las mujeres son extremadas en todo: o son mejores o son peores que los hombres.
Las mujeres son muy útiles, sobre todo por la noche y, con frecuencia, durante el día.
Las mujeres, cuando aman, ponen en el amor algo divino. Tal amor es como el sol, que anima a la naturaleza.
Las palabras es todo lo que tenemos.
Las pasiones son como los vientos, que son necesarios para dar movimiento a todo, aunque a menudo sean causa de huracanes.
Las pequeñeces no son lo eterno, y lo demás, todo lo demás, lo breve, lo muy breve.
Las riñas de los amantes renuevan el amor.
Legamos amor a nuestras mujeres; recuerdos a nuestros hijos; pero en los campos quemados por la guerra, a los amigos legamos el caminar.
Libéranos de todos esos conceptos malditos, de esa manía de tener que explicarlo todo.
Llamamos destino a todo cuanto limita nuestro poder.
Llenas tus valijas de amor y te vas, a buscar el cuerpo de una mujer, y descubrís que amor es más que una noche y juntos ver amanecer.
Llevadero sería todo trabajo, si no lo acrecentase la opinión de las gentes.
Llevé la fotografía como un pato al agua. Nunca deseé hacer todo lo demás. El entusiasmo sobre el tema es el voltaje que me empuja sobre la montaña de la servidumbre necesaria para producir la fotografía final.
Llueve copiosamente sobre mi cara y sólo pienso en tu lejano amor mientras cobijo con todas mis fuerzas, la esperanza.
Lo blando es más fuerte que lo duro; el agua es más fuerte que la roca, el amor es más fuerte que la violencia.
Lo contrario del amor no es el odio, sino la indiferencia.
Lo malo del amor es que muchos lo confunden con la gastritis y, cuando se han curado de la indisposición, se encuentran con que se han casado.
Lo más fuerte es la necesidad, porque domina todo.
Lo más grande es el espacio, porque lo encierra todo.
Lo más sabio es el tiempo, porque esclarece todo.
Lo más triste del amor es que no sólo no puede durar siempre, sino que las desesperaciones son también olvidadas pronto
Lo más triste del amor es que no sólo no puede durar siempre, sino que las desesperaciones son también olvidadas pronto.