Equilibra tus necesidades con tu riqueza y no serás pobre ni rico, sino simplemente afortunado.
La experiencia no tiene valor ético alguno, es simplemente el nombre que damos a nuestros errores.
La libertad no es simplemente un privilegio que se otorga; es un habito que ha de adquirirse.
Las fronteras de lo improbable ya han sido cruzadas simplemente por el hecho de que el mundo existe.
Los errores en materia de religión son peligrosos; en filosofía son simplemente ridículos.