Creen que moverse es vivir. Y se mueven, no para vivir. Se mueven para creer que viven.
Creer que un enemigo débil no puede dañarnos, es creer que una chispa no puede incendiar el bosque.
Cualquiera puede hacer una cosa, el mérito está en hacer creer al mundo que uno lo ha hecho.
Cuando las cosas no quieren conformarse con nosotros, nosotros debemos conformarnos con ellas.
Cuando se sugieren muchos remedios para un solo mal, quiere decir que no se puede curar.