Con bolsillo ajeno, todo el mundo es limosnero.
Con buenas palabras y mejores hechos, conquistaras el mundo entero.
Con el dinero sucede lo mismo que con el papel higiénico; cuando se necesita, se necesita urgentemente.
Con la conservación de energía que posee todo lo físico, el sufrimiento ni siquiera necesita las lecciones de la memoria: así, un hombre que ha olvidado las hermosas noches que pasó al claro de luna en el bosque, todavía sufre del reumatismo que cogió en él.
Con lluvia este camino, sería otro camino, este bosque otro bosque.
Contemplado el mundo se puede dudar de la mujer; pero ya no es posible dudar más mirando la propia madre.
Corre por el mundo una conjura general y permanente contra dos cosas, a saber, la poesía y la libertad. La gente de buen gusto se encarga de exterminar a la primera, y la gente de orden de perseguir a la segunda.
Creo en un juicio final que castigará a aquellos que se atrevieron a lucrar contra este elevado arte.
Creo que las mujeres sostienen el mundo en vilo, para que no se desbarate mientras los hombres tratan de empujar la historia. Al final, uno se pregunta cuál de las dos cosas será la menos sensata.
Cualquier mago les dirá que los científicos son las personas más fáciles de engañar del mundo;en sus laboratorios, el instrumental es exactamente lo que parece. No hay espejos ocultos, ni compartimentos secretos, ni imanes escondidos. El pensamiento de un científico es racional, se basa en toda una vida de experiencia con un mundo racional. Pero los métodos del mago son irracionales y totalmente ajenos a la experiencia del científico.
Cualquiera puede hacer una cosa, el mérito está en hacer creer al mundo que uno lo ha hecho.
Cuando alguien que de verdad necesita algo, lo encuentra, no es la casualidad quien lo procura, sino él mismo. Su propio deseo y su propia necesidad le conducen a ello.
Cuando descubro un ser cálido descubro la frialdad del mundo.
Cuando Dios creó el Mundo vio que era bueno. ¿Qué dirá ahora?
Cuando el amor es rey, no necesita palacio.
Cuando el villano está en el mulo, no conoce a dios ni al mundo.
Cuando entro en mi cuarto solitario después de un fracaso, éste no me hiere. Pero si estuviese obligado a encontrarme con los ojos interrogadores de mi mujer y tener que decirle que he fallado nuevamente. . . No podría soportarlo.
Cuando hayamos aprendido debemos enseñarlo a quien nada sabe todavía; de este modo pagamos una deuda sacrosanta.
Cuando las mujeres hablan, el mundo calla.
Cuando me esté retratando en tus pupilas de fuego, cierra de pronto los ojos por ver si me coges dentro.
Cuando me pidieron ir a la guerra de Irak yo dije que no: no me interesaba este tipo de cobertura que depende sólo de los boletines del estado mayor. Así no hay periodismo posible, ya que no hay forma de saber sobre el terreno en qué medida esa información refleja o no la realidad.
Cuando muerto esté en la tumba toca en ella la guitarra, y verás a mi esqueleto alzarse para escucharla.
Cuando nacen las sociedades, los jefes de un Estado son los que dan a éste su carácter especial. Después, este carácter especial es el que forma a los jefes de Estado.
Cuando se tienen veinte años, uno cree haber resuelto el enigma del mundo; a los treinta reflexiona sobre él, y a los cuarenta descubre que es insoluble.
Cuando sonrió el hombre, el mundo lo amó. Cuando rió, le tuvo miedo.