La filosofía es un silencioso diálogo del alma consigo misma en torno al ser.
La fortuna es un montoncillo de arena: un viento la trae y otro se la lleva.
La guerra no es sino la continuación de las transacciones políticas, llevando consigo la mezcla de otros medios. Decimos la mezcla de otros medios, para indicar que este comercio político no termina por la intervención de la guerra.
La guerra sólo tiene una buena cosa; la paz que trae en pos de ella.
La libertad de expresión lleva consigo cierta libertad para escuchar.
La luna, la nieve, y ahora a través de la llovizna, ¡la luz de la mañana!.
La maravilla de un solo copo de nieve supera la sabiduría de un millón de meteorologistas.
La mujer celosa en sí no reposa, y al marido siempre le trae afligido.
La naturaleza es verdaderamente coherente y confortable consigo misma.
La nieve no rompe las ramas del sauce.
La nieve que vimos caer ¿Es otra este año?.
La nieve se derritió En la espalda del gran buda.
La riqueza trae a los amigos, la pobreza los selecciona.
La soledad no trae felicidad.
La superstición trae mala suerte.
La única cosa agradable sobre ser imperfecto es la alegría que trae a otros.
La vida trae a veces brisa ligera, palabras que sólo son palabras, íntimos coloquios de enamorados bajo los olivos.
Las críticas no son otra cosa que orgullo disimulado. Un alma sincera para consigo misma nunca se rebajará a la crítica. La crítica es el cáncer del corazón.
Los claros del cielo y la luna y la nieve son un color.
Mejor comer pan de mendigo con quienes amamos vivir, que llevar la culpa consigo y probar su sangre en rico festín.
Mi único credo. La montaña del tesoro, las flores de seis pétalos de la nieve.
Mira que a veces el demonio nos engaña con la verdad, y nos trae la perdición envuelta en dones que parecen inocentes.
No consigo dormir. Tengo una mujer atravesada entre los párpados. Si pudiera, le diría que se vaya; pero tengo una mujer atravesada en la garganta.
No debes quejarte de la nieve en el tejado de tu vecino cuando también cubre el umbral de tu casa.
Noche tras noche mi sopa de legumbres acompaña la nieve.