El universo es una perversa inmensidad hecha de ausencia. Uno no está en casi ninguna parte.
En el viaje al éxito, la primera parte del viaje es tan importante como la última parte.
Es empresa vana tratar de ridiculizar a un necio rico: las carcajadas están de su parte.
Es pueril preguntarse dónde van las cosas y la gente. No van a ninguna parte y han llegado.