A perdonar sólo se aprende en la vida cuando a nuestra vez hemos necesitado que nos perdonen mucho.
A veces en la vida hay que saber luchar no sólo sin miedo, sino también sin esperanza.
Ahora mismo le puedes decir basta al miedo que heredaste, porque la vida es aquí y ahora mismo.
Al hombre le es dado un número determinado de experiencias; al economizarlas, prolonga su vida.