Madre, te bendigo porque supiste hacer de tu hijo un hombre real y enteramente humano.
Me alegro de no haber sido hombre, porque entonces hubiera tenido que casarme con una mujer.
Me atreveré a todo lo que pueda hacer un hombre. Quien se atreva a más es insensato.
Nada que un hombre haga lo envilece más que el permitirse caer tan bajo como para odiar a alguien.