Cuando desciende el sol de la cultura, hasta los enanos proyectan grandes sombras.
Cuando descubro un ser cálido descubro la frialdad del mundo.
Cuando digo "Capitalismo", quiero decir Capitalismo completo, puro, incontrolado, no regulado, laissez-faire. Con una completa separación del Estado y de la economía del mismo modo y por las mismas razones por las que existe separación entre el Estado y la Iglesia.
Cuando digo que mira, miento. No mira, sino que contempla distraídamente. De modo que quizá sólo fugazmente, casi sin querer, puede ocuparse de lo que le rodea.
Cuando dios borra, es que va a escribir algo.
Cuando Dios creó el Mundo vio que era bueno. ¿Qué dirá ahora?
Cuando dios da pan duro, da dientes fuertes.
Cuando dios quiere enloquecer a alguien, satisface todos sus deseos.
Cuando Dios se calla, uno puede hacerle decir lo que quiere.
Cuando dios se hizo hombre, ya el diablo se había hecho mujer.
Cuando Dios tiene su altar en el corazón de la madre toda la casa es su templo.
Cuando dirijo, hago de padre; cuando escribo, hago de hombre; cuando actúo, hago el idiota.
Cuando diseño no considero el aspecto técnico y comercial, si no que en los sueños y los deseos de la gente para quien esta enfocado el proyecto u objeto.
Cuando dos hermanos trabajan juntos las montañas se convierten en oro.
Cuando dos personas están bajo la influencia de la más violenta, la más insana, la más ilusoria y la más fugaz de las pasiones, se les pide que juren que seguirán continuamente en esa condición excitada, anormal y agotadora hasta que la muerte los separe.
Cuando dos personas llegan a conocerse bien, su intimidad pierde cada vez más su carácter milagroso, hasta que su antagonismo, sus desilusiones, su aburrimiento mutuo, terminan por matar lo que pueda quedar de la excitación inicial.
Cuando dos personas que se quieren, chocan, no se mezclan, se rompen.
Cuando dos se quieren bien, con uno que coma basta.
Cuando doy, doy a mi mismo.
Cuando dudes de actuar, siempre entre "hacer" y "no hacer" escoge hacer. Si te equivocas tendrás al menos la experiencia.
Cuando el agua te llega al cuello, no te preocupes si no es potable.
Cuando el amor desenfrenado entra en el corazón, va royendo todos los demás sentimientos; vive a expensas del honor, de la fe y de la palabra dada.
Cuando el amor es feliz lleva al alma a la dulzura y a la bondad.
Cuando el amor es la normas, no hay voluntad de poder, y donde el poder se impone, el amor falta.
Cuando el amor es rey, no necesita palacio.