Y ese miedo idiota de verte viejo y sin pareja; te hace escoger con la cabeza lo que es del corazón.
¡Fuego, la mañana hace fuego y nos golpea los corazones! Levantémoslos arriba, siempre arriba.
¡Oh amor poderoso¡ Que a veces hace de una bestia un hombre, y otras, de un hombre una bestia.