La no violencia lleva a la más alta ética, lo cual es la meta de la evolución. Hasta que no cesemos de dañar a otros seres vivos, somos aún salvajes.
La rebelión consiste en mirar una rosa hasta pulverizarse los ojos.
La religión no volverá a recuperar su antiguo poder hasta que no se le vean cambios en su rostro, como los hubo en la ciencia.
La Revolución francesa, obra de la filosofia. Pero qué salto desde el "cogito ergo sum" hasta el primer grito de "A la Bastille!" resonando en el Palais Royal. Para la Bastilla fue la trompeta del Juicio Final.
La salud no es conocida hasta que es perdida.
La táctica y la diplomacia están bien en las relaciones internacionales y políticas, quizás hasta en los negocios; en la ciencia sólo los hechos.
La uva no es uva, hasta que está madura.
La vanidad es tan fantástica, que hasta nos induce a preocuparnos de lo que pensarán de nosotros una vez muertos y enterrados.
La voz del intelecto es apagada, pero no descansa hasta haber logrado hacerse oír, y siempre termina por conseguirlo después de ser rechazada infinitas veces.
Las cadenas de la costumbre son tan sólidas que no se sienten, hasta vuelven tan fuertes que nadie las puede romper.
Las cadenas del hábito son generalmente demasiado débiles para que las sintamos, hasta que son demasiado fuertes para que podamos romperlas.
Las diminutas cadenas de los hábitos son generalmente demasiado pequeñas para sentirlas, hasta que llegan a ser demasiado fuertes para romperlas.
Las montañas y el jardín se van adentrando hasta mi habitación en verano.
Las obras de arte nacen siempre de quien ha afrontado el peligro, de quien ha ido hasta el extremo de la experiencia, hasta el punto que ningún humano puede rebasar. Cuanto más se ve, más propia, más personal, más única se hace una vida.
Lo que pongas en los primeros años de tu vida quedará en ella hasta más allá de la muerte.
Los amores son como las setas, que no sabe uno si son venenosas hasta que ya las ha comido y es demasiado tarde.
Los días no adquieren sabor hasta que uno escapa a la obligación de tener un destino.
Los hombres son tan simples, y se someten hasta tal punto a las necesidades presentes, que quien engaña encontrará siempre quien se deje engañar.
Los que mas han amado hasta ahora al ser humano le han hecho siempre el máximo daño: han exigido de él lo imposible, como todos los amantes.
Luna de agosto. Hasta el portón irrumpe la marejada.
Máxima admirable: no hablar de las cosas hasta después de que estén hechas.
Me gusta la gente que se niega a hablar hasta que está preparada para hablar.
Mi cazador de libélulas, ¿hasta donde se me habría extraviado hoy?.
Mi educación fue muy buena hasta que el colegio me la interrumpió.
Mi río con tu río, mi mano con tu mano se ignoran. Cariño mío, alegría hasta que el alba alcance a la siguiente.