El mejor consejo lo da siempre la experiencia, pero siempre llega demasiado tarde.
El mejor destino que hay es el de supervisor de nubes, acostado en una hamaca mirando al cielo.
El mejor límite para el dinero es el que no permite caer en la pobreza ni alejarse mucho de ella.
El mejor matrimonio sería aquel que reuniese a una mujer ciega con un marido sordo.
El mejor médico es el que conoce la inutilidad de la mayor parte de las medicinas.
El mejor medio de conservar los amigos es no pedirles ni deberles nada.
El mejor olor, el del pan; el mejor sabor, el de la sal; el mejor amor, el de los niños.