El arte es como un naranjo, que precisa un suelo y un clima adecuado para florecer y dar fruto.
El arte es siempre la gran verdad de la naturaleza vista a través del entendimiento humano.
El artista debe estar siempre con aquellos que padecen la historia, no con los que la hacen.
El carpintero hábil no se hace torpe para poder ser imitado por cualquiera de sus ayudantes.