Cuando se teme a alguien es porque a ese alguien le hemos concedido poder sobre nosotros.
Culpar a los demás es no aceptar la responsabilidad de nuestra vida, es distraerse de ella.
Cumple la ley suprema de desdeñarlas todas, sobre el cuerpo desnudo no envejecen las modas
Dad al hombre salud y metas a alcanzar y no se detendrá a pensar sobre si es o no feliz.
Dar ejemplo no es la principal manera de influir sobre los demás; es la única manera.
De los males de la vida nos consolamos con la muerte, y de la muerte, con los males de la vida.