No se debe juzgar a los hombres por su fisonomía, sobre todo, sin ponerlos a prueba.
No se es escritor por haber elegido decir ciertas cosas, sino por la forma en que se digan.
No se puede decir nada tan absurdo como para que no haya sido dicho por algún filósofo.
Nos hemos de liberar de la falsa idea de que la fe ya no tiene nada que decir a los hombres de hoy.
Otras más variadas: El fin supremo de la ciencia es la verdad: el fin del Arte es el placer.