Uno debe cambiar con la época, a menos que sea tan importante como para hacer que la época cambie.
Vivir para los demás no es solamente una ley de deber, sino también una ley de felicidad.
¡A trabajar! Provoca una infinita alegría saber qu todavía tenemos las mejores cosa por hacer.
¡La felicidad! No existe palabra con más acepciones; cada uno la entiende a su manera.
¡una vida llena de felicidad! nadie podría soportarla, porque sería un infierno en la tierra.