Si no vives peligrosamente, no vives. La vida sólo florece en el peligro. La vida nunca florece en la seguridad. (. . . ) cuando todo está yendo a la perfección, fíjate, te estás muriendo y no pasa nada.
Si nos atrevemos a creer en la vida eterna, a vivir para la vida eterna, veremos cómo la vida se torna más rica, más grande, libre y dilatada.
Si pudiéramos profundizar en la vida intima de nuestros enemigos, encontrariamos tanta tristeza y sufrimientu que desarmarían cualquier hostilidad nuestra.
Si puedo evitar que un corazón sufra, no viviré en vano; si puedo aliviar el dolor en una vida, o sanar una herida o ayudar a un petirrojo desmayado a encontrar su nido, no viviré en vano.
Si te detienes cada vez que un perro ladra nunca llegarás al final de tu camino.
Si te sientes solo mira al cielo de noche y cada una de las estrellas que veas, te concederán un deseo.
SI tienes un verdadero propósito en tu vida, no necesitas que nadie te presione; tu pasión te guiará allí.
Si tu llamas experiencias a tus dificultades y recuerdas que cada experiencia te ayuda a madurar, vas a crecer vigoroso y feliz, no importa cuán adversas parezcan las circunstancias.
Si tu mente no está atestada de un fárrago inútil, la vida maravillosa se abre ante ti.
Si tuviera que dimitir cada vez que el Gobierno discrepa conmigo, no duraría una semana como ministro de Defensa.
Si un hombre aspira a una vida correcta, su primer acto de abstinencia es el de lastimar animales.
Si un hombre cualquiera, incluso vulgar, supiera narrar su propia vida, escribiría una de las más grandes novelas que jamás se haya escrito.
Si un partido político se atribuye el mérito de la lluvia, no debe extrañarse que sus adversarios le hagan culpable de la sequía.
Si un trovador me pidiera un poquito de luz para su vida, toda la selva en fuego convertida para su corazón yo le ofreciera.
Si usted cree, como los griegos, que el hombre está a merced de los dioses, debe escribir tragedias. El fin es inevitable desde el principio. Pero si cree que el hombre puede resolver sus propios problemas y que no está a merced de nadie, entonces probablemente escriba melodramas.
Si usted puede cambiar tu mente, puedes cambiar tu vida.
Si yo no hubiera sido, el alma mía repartida pondría en cada cosa una chispa de amor...
Si yo te diera la vida, ¿qué podría darte?.
Sí, en el toreo está presente la muerte, pero como aliada, como cómplice de la vida: la muerte hace de comparsa para que la vida se afirme.
Siempre es recomendable recorrer la vida a contramano.
Siempre hay un mañana y la vida nos da otra oportunidad para hacer las cosas bien, pero por si me equivoco y hoy es todo lo que nos queda, me gustaría decirte cuanto te quiero, que nunca te olvidaré.
Siempre me gusta ver el lado optimista de la vida, pero soy lo suficientemente realista como para saber que la vida es un asunto complejo.
Siempre se debe preferir la acción a la crítica.
Siempre se ha de conservar el temor, más jamás se debe mostrar.
Siempre se repite la misma historia: cada individuo no piensa más que en sí mismo.