La gente busca la felicidad como un borracho busca su casa, sabe que existe pero no la encuentra.
La gente no busca razones para hacer lo que quiere hacer, busca excusas.
La gente no va a la iglesia en busca de sermones sino a soñar con dios.
La iglesia salva a los pecadores, pero la ciencia busca acabar con su manufactura.
La inteligencia busca, pero quien encuentra es el corazón.
La memoria es como el mal amigo; cuando más falta te hace, te falla.
La muerte es ese amigo que aparece en las fotografías de la familia, discretamente a un lado, y al que nadie acertó nunca a reconocer.
La música es una de las cosas que puede salvar al mundo, porque un hombre que busca y encuentra y se solaza horas y días y años y años luz, a través de generaciones, con la belleza, ¿qué otra cosa puede querer que un mundo mejor?.
La persona inteligente busca la experiencia que desea realizar.
La única manera de poseer un amigo es serlo.
La verdadera pasión es una busca, no un impulso, un arrebato, un instinto de cazador.
La vida de un amigo, es la nuestra, como la verdadera vida de cada uno es la de todos.
La vida es un soplo en el continuo girar de nuestro Planeta, más un verdadero Amigo permanece mas allá de la muerte.
La vista de un amigo, refresca como el rocío de la mañana.
Lengua de mal amigo, más afilada que un cuchillo.
Lo malo del amigo es que nos dice las cosas desagradables a la cara; el enemigo las dice a nuestras espaldas y como no nos enteramos, nada ocurre.
Lo mejor que puedes dar a tu enemigo es el perdón; a un oponente, tolerancia; a un amigo, tu corazón; a un niño, buen ejemplo; a un padre, respeto; a tu madre, sentirse orgullosa; a ti mismo, quererte; a todo hombre, caridad.
Lo que no tenemos lo encontramos en un amigo. Creo en este obsequio y lo cultivo desde la infancia. No soy en ello diferente a la mayor parte de los seres humanos. La amistades la gran liga inicial entre el hogar y el mundo. El hogar, feliz o infeliz, es el aula de nuestra sabiduría original pero la amistad es su prueba.
Lo que quiere el sabio, lo busca en sí mismo; el vulgo, lo busca en los demás.
Mas vale tener un enemigo conocido que un amigo a la fuerza.
Mi mejor amigo es el que enmienda mis errores o reprueba mis desaciertos.
Mi padre era poco amigo de explicaciones. Pienso que tal vez prefería enfrentarme al paisaje, a los hombres, a las cosas que pueden ayudar a entender la vida, para que poco a poco yo sacara mis propias conclusiones. Tenía, sí, el buen tacto de no ofrecerme espectáculos vulgares. Muchas veces, con una mirada o una palabra, me ordenaba alejarme de gentes que él no consideraba oportunas o dignas para mis ojos.
Mucha gente se fascina por los detalles y se olvida de lo que busca.
Muchas veces lo que no se halla cuando se busca, sale al encuentro cuando no se busca.
Ningún amigo como un hermano; ningún enemigo como un hermano.