El sabio es sabio porque ama. El loco es loco porque piensa que puede entender el amor.
El sabio puede sentarse en un hormiguero, pero sólo el necio se queda sentado en él.
El sueño es la pequeña puerta escondida en el más profundo y más íntimo santuario del alma.
El teatro no puede desaparecer porque es el único arte donde la humanidad se enfrenta a sí misma.
En el amor no existe el libre albedrío, nadie puede decidir de quién va a enamorarse.
En Hollywood te pueden pagar 1.000 dólares por un beso, pero sólo 50 centavos por tu alma.