La lectura de un buen libro es un diálogo incesante, en que el libro habla, y el alma contesta.
La magia de escribir un libro está en su destino insospechado, puede ser la basura.
La maravilla de un solo copo de nieve supera la sabiduría de un millón de meteorologistas.
La mujer y el libro que han de influir en una vida, llegan a las manos sin buscarlos.
La radio marca los minutos de la vida; es diario, las horas, el libro; los días.