Quien lleve a su infancia consigo, permanecerá joven para siempre.
Quien no sabe bailar dice que los tambores no valen para nada.
Quien quiera vivir en paz, que esté preparado para pelear.
Quien se controla a sí mismo y por el bien, no tendrá dificultad alguna para gobernar con eficacia. Al que no sabe gobernarse a sí mismo, le resultará imposible ordenar la conducta de los demás hombres.
Quien sólo vive para sí, está muerto para los demás.
Quien tiene la íntima substancia, también tiene las palabras; quien tiene palabras, no siempre tiene también la íntima substancia.
Quienquiera que ponga su mano sobre mí para gobernarme es un usurpador y un tirano y le declaro mi enemigo.
Quiero encontrar para la mujer el equivalente del traje masculino.
Quisiera abrir mis venas para buscar tus rastros.
Quisiera tener un rizo de tu oscura cabellera, para gastarme los ojos en sólo mirar sus hebras.
Quisiera vivir para estudiar, no estudiar para vivir.
Quisiera yo que siquiera al final el arduo camino fuera para bien o para mal, árbol no de ciencia artera, sí, pecado original.
Quizá, el camino más directo para conquistar la fama sea el afirmar con seguridad y pertinencia y, por cuantos modos sea posible, el haberla conquistado.
Regaría con mis lágrimas las rosas, para sentir el dolor de sus espinas, y el encarnado beso de sus pétalos.
Ruego constantemente a Dios para que nazca sobre esta tierra algún gran espíritu, hombre o mujer, encendido en la piedad divina, capaz de librarnos de nuestros horrendos pecados contra los animales, salvar las vidas de criaturas inocentes.
Saber para prever, a fin de poder.
Se advierte: Las Autoridades Sanitarias pueden ser perjudiciales para la salud.
Sé fuerte cual pantera para hacer su deseo, ágil como corzo, valiente cual león.
Se ha dicho que hace falta poseer muchas lenguas para poder pensar conscientemente en la propia. No hay nada más exacto. Cada idioma es una visión del mundo.
Se lo suficientemente valiente para vivir la vida con la que sueñas en lugar con la vida que otros esperan que vivas.
Se necesita más genialidad para hacer el amor que para liderar ejércitos.
Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para aprender a callar.
Se necesitan virtudes más grandes para soportar la prosperidad que la suerte adversa.
Se piensa que lo justo es lo igual, y así es; pero no para todos, sino para los iguales. Se piensa por el contrario que lo justo es lo desigual, y así es, pero no para todos, sino para los desiguales.
Sé que no tienes nada. Por ello te pido todo. Para que tengas todo.