Zozobra la verdad, más nunca ahogada la veras.
¡De ti nunca se sacian los ojos!.
¡Las caras de las muñecas!. Aunque nunca lo pensé me he vuelto viejo.
¡qué beneficioso seria para la vida que nos percatásemos y enterásemos a tiempo de que nunca estaremos en mejores términos con nuestra amada que si elogiamos a nuestro rival!. Su corazón se llenara de gozo y cualquier temor a herirnos o perdernos se habrá desvanecido; nos hará confidentes suyos, y nosotros, muy contentos, nos convenceremos de que el fruto del árbol será nuestro si tenemos el suficiente buen humor para dejar a otros las hojas que vayan cayendo.
¿Habrá un fin al saber?. Nunca, nunca. Se está siempre al principio de una curiosidad inextinguible frente a infinita vida.
¿Nunca has, en sueños, en el cielo de otra cama contado nuevas estrellas...?.
¿Quién habló de la imaginación al poder? Nunca hubo imaginación en el poder.
¿Sufre más aquél que espera siempre que aquél que nunca esperó a nadie?.