Olvida uno su falta después de haberla confesado a otro, pero normalmente el otro no la olvida.
Aguardar demasiado a un convidado es una falta de consideración para los que están presentes.
Al hombre perverso se le conoce en un sólo día; para conocer al hombre justo hace falta más tiempo.
Al que tiene mujer hermosa, o castillo en frontera, o viña en carretera, nunca le falta guerra.
Así como el hierro se oxida por falta de uso, también la inactividad destruye el intelecto.
Cuando el amor es la normas, no hay voluntad de poder, y donde el poder se impone, el amor falta.