Como la recién casada: con ganas de todo y ganas de nada.
Como mala persona soy un completo desastre. Hay montones de gente que afirman que no he hecho nada malo en toda mi vida. Por supuesto sólo se atreven a decirlo a mis espaldas.
Como no estás experimentado en las cosas del mundo, todas las cosas que tienen algo de dificultad te parecen imposibles.
Como no tenemos nada más precioso que el tiempo, no hay mayor generosidad que perderlo sin tenerlo en cuenta.
Cómo vivir sin verte si se que pertenezco a esa región en donde la emoción le gana siempre a la razón, porque Argentina tiene locas golondrinas en el corazón, en donde la esperanza, siempre inventa algún color, y la gente no se cansa de soñar y dar amor.
Con amor y aguardiente, nada se siente.
Con frecuencia el hombre cree estar conduciéndose a sí mismo cuando es conducido, y mientras con su mente tiende a una meta, su corazón le arrastra insensiblemente hacia otra.
Con mucho porfiar, se pierde la verdad.
Con su todo es ahora, con su nada es eterno, con su rap y su chotis, con su okupa y su skin, aunque muera el verano y tenga prisa el invierno la primavera sabe que la espero en Madrid.
Con un dios le bendiga no se compra nada.
Conocí a un genio en el tren hoy como de 6 años de edad se sentó a mi lado y mientras el tren avanzaba a lo largo de la costa llegamos hasta el océano entonces él me miró y dijo, no es hermoso. Fue la primera vez que me percaté de ello.
Considero la pobreza como algo obsceno. Y creo que la teoría de que el mercado libre se encargará de todo es un absurdo y una obscenidad más. El llamado mercado libre de lo que se preocupa es de enriquecer a las corporaciones más poderosas. Creo que la última tendencia del mercado libre es que los pobres sean aún más pobres.
Contra la fuerza, fuerzas valgan, ya que razones no pueden nada.
Contra la razón augusta, nada. Sobre el deber de dar empleo a las fuerzas que puso en la mente la naturaleza, nada. Ni rey sobre el derecho político, ni rey sobre la conciencia. Por encima del hombre, sólo el cielo.
Contra los valores afectivos no valen razones, porque las razones no son nada más que razones, es decir, ni siquiera verdad.
Cortesía de boca, mucho consigue y nada cuesta.
Créate un buen grupo de apoyo, especialmente para cuando no quieras hacer algo. Ellos te ayudarán a crecer.
Creen que no pasará nada porque cerraron la puerta.
Creer posible algo es hacerlo cierto.
Creerse incapaz de algo, es casi ya serlo.
Creo -es nada más un creer- que de mi poesía bien podría hacerse el arco con que una gacela traza la mañana.
Creo que las mujeres sostienen el mundo en vilo, para que no se desbarate mientras los hombres tratan de empujar la historia. Al final, uno se pregunta cuál de las dos cosas será la menos sensata.
Creo que, en la vida práctica, el éxito, el auténtico éxito, tiene algo un tanto indecoroso; hay algo en la ambición que es siempre indecoroso.
Cualquier cosa debe tomarse seriamente, nada trágicamente.
Cualquiera puede enfadarse, eso es algo muy sencillo. Pero enfadarse con la persona adecuada, en el grado exacto, en el momento oportuno, con el propósito justo y del modo correcto, eso, ciertamente, no resulta tan sencillo.