Más vale poco con justicia, que mucho con derecho.
Si los espectáculos cultos ponen ante mis ojos un mundo de inmoralidad y una exuberancia de lujo que ciega mis ojos al tocar al corazón, hoy tengo derecho a mis corridas de toros.
A ninguno le da pena, comer cosita buena.
Cree que la vida vale la pena y tu creencia ayudará a crear el hecho.
Cuando alguien desea algo debe saber que corre riesgos y por eso la vida vale la pena.
Cuando nos invade la pena, un día dura tanto como tres otoños.
Cuando se desahoga el sentimiento, la pena es menos.
De mis disparates de juventud lo que más pena me da no es el haberlos cometido, sino el no poder volver a cometerlos.
Dejaré que muera en mí el deseo de amar tus ojos dulces, porque nada te podré dar sino la pena de verme eternamente exhausto.
Dolor paciente que dolor no deja...¡La mayor pena es la que no se sabe!.
Duermes, mientras la ciudad golpea el cristal con su llanto, ajena a tu sueño. Qué pena que este milagro de verte dormida en paz no desborde el muro de esta habitación.
El alma desordenada lleva en su culpa la pena.
El artista sabe lo que hace, pero para que merezca la pena debe saltar esa barrera y hacer lo que no sabe.
El hombre desdichado busca un consuelo en la amalgama de su pena con la pena de otro.
El hombre es un experimento; el tiempo demostrará si valía la pena.
En el arte, nada que merezca la pena se puede hacer sin genio; en ciencia, incluso una capacidad muy modesta puede contribuir a un logro supremo.
En la alta costura, y en los próximos años, detrás de mí no vendrá nadie que merezca la pena. No veo ni un solo talento.
Entra una nueva pena y las viejas penas de la casa la reciben calladas, no muertas.
Estas son mis últimas palabras hacia ti. No tengas miedo de la vida. Cree que merece la pena vivirla y tu creencia creará el hecho.
Estoy de acuerdo en que las sociedades decreten abolir la pena de muerte; pero que empiecen por abolirla los asesinos.
Hay algo bueno en este mundo y merece la pena luchar por ello.
Hoy sufres una pena, pero mañana recibirás la recompensa de haberla superado.
Juez que dudando condena, merece pena.
La alegría es pena que se disimula; sobre la tierra no hay más que dolores.
La educación es algo admirable, sin embargo, es bueno recordar, que nada que valga la pena se puede enseñar.