Si en la otra vida no hubiera música, habría que importarla.
Aprender música leyendo teoría musical es como hacer el amor por correo.
Aprendí administración de las hormigas; música, oyendo los aguaceros; escultura buscando parecido a los seres en las líneas de las rocas; color, en la luz; poesía, en toda la naturaleza.
Cada cual interpreta a su manera la música de los cielos.
Con la música, la vida tiene más sentido.
Creo que quien ha disfrutado con los sublimes placeres de la música deberá ser eternamente adicto a este arte supremo y jamás renegará de él.
Cualquiera que desee expresar significado con símbolos y palabras, con música, pintura, debe encontrar cierto placer en las tareas imposibles, poseer la voluntad de tolerar una gran frustración, un toque de quijote.
Cuando uno se inspira en algo bueno, la música nace con fluidez, las melodías brotan; realmente esto es una gran satisfacción.
Debido a que la música cambia constantemente, su estudio no termina nunca. El arte de ayer es lo comercial de hoy, y la vanguardia de hoy es el lugar común de mañana.
Desde que el hombre existe ha habido música. Pero también los animales, los átomos y las estrellas hacen música.
Donde hay música no puede haber cosa mala.
El arte de la música es el que más cercano se halla de las lágrimas y los recuerdos.
El jarrón da forma al vacío y la música al silencio.
El pensamiento, cuanto más puro, tiene su número, su medida, su música.
El que escucha música siente que su soledad, de repente, se puebla.
En el pensamiento científico siempre están presentes elementos de poesía. La ciencia y la música actual exigen de un proceso de pensamiento homogéneo.
En la música es acaso donde el alma se acerca más al gran fin por el que lucha cuando se siente inspirada por el sentimiento poético: la creación de la belleza sobrenatural.
En la música todos los sentimientos vuelven a su estado puro y el mundo no es sino música hecha realidad.
En verdad, si no fuera por la música, habría más razones para volverse loco.
Es extraordinario lo potente que es la mala música.
Es imposible traducir la poesía. ¿acaso se puede traducir la música?.
Estoy seguro de que la buena música la vida alarga.
Fuera de la música, todo, incluso la soledad y el éxtasis, es mentira. Ella es justamente ambos, pero mejorados.
Fuera de mí, en el espacio, errante, la música doliente de un vals; en mí, profundamente en mi ser, la música doliente de tu cuerpo; y en todo, viviendo el instante de todas las cosas, la música de la noche iluminada.
Hay que escribir libros como quien compone música.