La televisión nos proporciona temas sobre los que pensar, pero no nos deja tiempo para hacerlo.
La tierra parece una magnífica flor de loto cuando el sol se alza sobre el paisaje nevado.
La única convicción auténtica que habría que tener es que nada se debe tomar demasiado seriamente.
La verdad adelgaza y no quiebra, y siempre anda sobre la mentira como el aceite sobre el agua.