Los sueños son las únicas mentiras que pueden dejar de serlo.
No me gustan las entrevistas, porque siempre tengo dificultades para acordarme de las mentiras que conté en la última.
Puedo estar sola fregar platos leer libros construir frases escuchar y ser feliz sin mala conciencia.
Seducimos valiéndonos de mentiras y pretendemos ser amados por nosotros mismos.
Sin mentiras la humanidad moriría de desesperación y aburrimiento.