Si reinase la justicia bastarÃa con haber construido nuestra casa y no se necesitarÃa otra protección que la del derecho público de propiedad. Pero como lo que está a la orden del dÃa es la injusticia, se exige que quien ha construido su casa esté también en condiciones de protegerla; de lo contrario, es incompleto su derecho a ella y el agresor tiene derecho a la fuerza bruta.
Arthur Schopenhauer