Debemos amar la oración. La oración dilata el corazón hasta el punto de hacerlo capaz de contener el don que dios nos hace de sà mismo.
Madre Teresa de Calcuta
Debemos amar la oración. La oración dilata el corazón hasta el punto de hacerlo capaz de contener el don que dios nos hace de sà mismo.
Madre Teresa de Calcuta