Cuando la polÃtica promete ser redención, promete demasiado. Cuando pretende hacer la obra de Dios, pasa a ser, no divina, sino demonÃaca. Benedicto XVI
Cuando la polÃtica promete ser redención, promete demasiado. Cuando pretende hacer la obra de Dios, pasa a ser, no divina, sino demonÃaca.