La lluvia lo despertó, una llovizna lenta; tenÃa los pies enredados en espirales de fibra óptica desechada. El mar de sonido de la vÃdeo galerÃa caÃa sobre él, retrocedÃa, regresaba. William Gibson
La lluvia lo despertó, una llovizna lenta; tenÃa los pies enredados en espirales de fibra óptica desechada. El mar de sonido de la vÃdeo galerÃa caÃa sobre él, retrocedÃa, regresaba.