Dejaré que muera en mà el deseo de amar tus ojos dulces, porque nada te podré dar sino la pena de verme eternamente exhausto.
Vinicius De Moraes
Dejaré que muera en mà el deseo de amar tus ojos dulces, porque nada te podré dar sino la pena de verme eternamente exhausto.
Vinicius De Moraes