Me piden lo profético que hay en mÃ, con melancolÃa y un golpe de objetos que llaman sin ser respondidos hay, y un movimiento sin tregua, y un nombre confuso. Pablo Neruda
Me piden lo profético que hay en mÃ, con melancolÃa y un golpe de objetos que llaman sin ser respondidos hay, y un movimiento sin tregua, y un nombre confuso.