Casi siempre me ocurre a mà con la gente lo que le ocurrÃa a Jesús de Nazaret cuando llamaba a sus discÃpulos: que siempre estaban todos dormidos. Arthur Schopenhauer
Casi siempre me ocurre a mà con la gente lo que le ocurrÃa a Jesús de Nazaret cuando llamaba a sus discÃpulos: que siempre estaban todos dormidos.