Mi sentimiento es que las naciones no pueden ser realmente una y que sus actividades no podrÃan llevar al bien común de la humanidad entera, a menos que se reconociera la ley familiar (de amor) en los asuntos nacionales e internacionales. Es decir, en el orden pacÃfico. Las naciones no pueden llamarse civilizadas sino en la medida que obedezcan a esta ley.
Mahatma Gandhi