¡Qué extraña máquina es el hombre!, usted le mete pan, vino, pescado y rábanos, y salen suspiros, risas y sueños. Nikos Kazantzakis
¡Qué extraña máquina es el hombre!, usted le mete pan, vino, pescado y rábanos, y salen suspiros, risas y sueños.