Las espadas y lanzas por sà mismas son inofensivas; el que por sà mismo es apacible y sin maldad alguna, se volverá feroz y terrible a causa de las malas compañÃas. Leonardo Da Vinci
Las espadas y lanzas por sà mismas son inofensivas; el que por sà mismo es apacible y sin maldad alguna, se volverá feroz y terrible a causa de las malas compañÃas.