En ocasiones pienso que el premio de quienes escribimos duerme, tÃmido y virginal, en el confuso corazón del lector más lejano.
Camilo Jose Cela
En ocasiones pienso que el premio de quienes escribimos duerme, tÃmido y virginal, en el confuso corazón del lector más lejano.
Camilo Jose Cela