Cuando digo que mira, miento. No mira, sino que contempla distraÃdamente. De modo que quizá sólo fugazmente, casi sin querer, puede ocuparse de lo que le rodea. Fiodor Mijailovich Dostoievski
Cuando digo que mira, miento. No mira, sino que contempla distraÃdamente. De modo que quizá sólo fugazmente, casi sin querer, puede ocuparse de lo que le rodea.